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Los niños protagonizan el Lunes de Cruces o Día de la Rosca

Los niños protagonizan el Lunes de Cruces o Día de la Rosca

Las pastelerías de la ciudad venderán hoy este dulce típico, que los padrinos suelen regalar a sus ahijados

Eladio Paniagua

Domingo, 8 de abril 2018, 09:49

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El lunes de la Dominica In Albis o De Quasimodo, es también conocido en la ciudad como Lunes de Cruces o Día de la Rosca. En otros lugares se denomina como Lunes de Agua, en cuya fecha se celebran un buen número de romerías bajo diversas advocaciones.

En Coria, en tiempos pasados, esta fiesta gozaba de una gran tradición y era organizada por la decana Cofradía de la Santa y Vera Cruz, que hunde sus raíces allá por el siglo XVI, siendo la cofradía más antigua de que se tienen noticias en la ciudad episcopal y donde los hermanos se reunían en asamblea al toque de la campana sermonera.

En este Lunes de Cruces, los Hermanos de la Santa y Vera Cruz partían procesionalmente con las cruces de la Catedral y se dirigían a al lugar donde están erigidas en la ciudad las distintas cruces (algunas ya desaparecidas) y en ese lugar rezaban un Padre Nuestro y unas oraciones, continuando el itinerario procesional hacia otras cruces, donde se rezaba de idéntico modo. Las cruces de que se tienen noticias y que han llegado a nuestros días por la importancia que en aquellos tiempos tuvieron son: La Tres del Calvario en el camino donde los franciscanos tenían un convento y que hoy es la Avenida de Alfonso VII; la cruz de la plaza de San Pedro; la cruz de la plaza del Rollo (ya desaparecida); la cruz del Carmen; la cruz del patio del colegio Virgen de Argeme; la cruz de Piedra (ya desaparecida); y finalmente otra poco conocida, que todavía existe, es la que está ubicada junto al Puente de Piedra, cerca de la fábrica de tomates.

Todas estas cruces en este día eran visitadas procesionalmente por los hermanos de la Santa y Vera Cruz, que eran acompañados por los niños que portaban cada uno la rosca que le regalaban sus padrinos de bautismo, como era costumbre y aún lo es. Esta rosca que era bendecida durante el acto litúrgico, después y en camaradería con los demás niños y familiares era degustada en el campo. Los hermanos de la Santa y Vera Cruz también lo celebraban este día con una comida en el campo que la solían hacer en la explanada del santuario de la Virgen de Argeme.

En este día son centenares las roscas que se venden en las distintas pastelerías de la ciudad. Unas roscas cuya elaboración es muy simple y que están confeccionadas a base de huevos, aceite, harina, un poco de sal y agua. Una vez elaborada la rosca se adorna a base de merengue y Manises. Este día son los niños los principales consumidores.

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