La Guardia Civil festejó su patrona la virgen del Pilar

Un año más la Guardia Civil, cuerpo fundado por el Duque de Ahumada, que eligió como divisa el honor y un uniforme severo, elegante y vistoso, siendo desde su fundación el cuerpo más cercano al ciudadano prestándole un gran servicio y siendo como su ángel de la guarda, festejó la fiesta de su patrona, la virgen del Pilar.

Los actos dieron comienzo con una solemne eucaristía en la parroquia de San Ignacio presidida por el párroco, Julián Carlos Pérez Domínguez, y con la presencia de autoridades civiles y militares, familiares y pueblo en general que quisieron sumarse a este acto en honor de la benemérita.

En la homilía, Pérez Domínguez, hizo alusión a las palabras del Papa en Fátima con motivo del centenario de las apariciones. Hizo alusión a la aparición de la virgen a orillas del Ebro al apóstol Santiago, diciendo que una madre nunca abandona a un hijo. Finalizó con un agradecimiento a la Guardia Civil de Coria, de la comarca y de la nación por ese trabajo cotidiano de velar por la seguridad de los ciudadanos.

En el ofertorio, miembros de la Guardia Civil y familiares ofrecieron la bandera de España y el tricornio, además de claveles rojos como símbolo de la sangre derramada por los miembros del cuerpo, y el pan y el vino como fruto del trabajo.

En las preces se pidió por los Guardias Civiles muertos en acto de servicio y se cantó La muerte no es el final.

Los actos finalizaron con el canto del Himno de la Guardia Civil y la despedida oficial de la ciudad del hasta ahora capitán de la Guardia Civil, Francisco Gago, quien en breve y tras su ascenso a comandante, será trasladado a otro lugar.