Borrar
Salto en el que Pardillo hiere a un mozo de Coria
El toro Pardillo de la peña El 27 hirió a un recortador en un salto acrobático al animal

El toro Pardillo de la peña El 27 hirió a un recortador en un salto acrobático al animal

Eladio Paniagua

Martes, 28 de junio 2016, 13:53

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En la tarde del lunes tuvo lugar la lidia del toro de la peña El 27 por nombre Pardillo perteneciente a la ganadería de Saboya, con procedencia Aldeanueva. Fue un toro castaño, fino de cabos y apretado de hechuras, señalado con el número 18 y guarismo 1. El toro de salida fue saludado con agrado por los aficionados por la buena imagen que presentaba y con unos pitones muy afilados que imponían respeto.

El toro tuvo mucha movilidad en la plaza haciendo raudas y veloces carreras en persecución de los mozos, que le propiciaron un buen número de recortes, algunos de gran riesgo. Destacar que durante la lidia, el recortador moralejano Emilio Motoro puso el toro en suerte para que Guillermo Piro lo saltara acrobáticamente. Pero el animal, que estaba bien armado de pitones, alcanzó al recortador coriano propiciándole cornada en la rodilla derecha.

Según el parte médico G.M.A. vecino de Coria ha sufrido una cornada en la cara lateral interna y posterior de rodilla derecha, con colgajo de piel y afectación del tejido celular subcutáneo, grasa y músculo sartorium. Fue intervenido en la enfermería y trasladado con constantes normales al Hospital Ciudad de Coria para su ingreso y observación.

Además, durante la lidia del toro se atendió en la enfermería a algunos corredores por contusiones y esguinces.

A raíz de este incidente, el toro se creció poniendo en alerta a los mozos que se percataron del peligro que entrañaba el animal. No obstante, los maletillas le probaron tanto con el capote como con la muleta y donde el toro colaboró, dando un buen juego en la plaza donde a pesar de su constante brega, el animal acabó con la boca cerrada, lo que presagiaba que en las calles podía dar una buena función.

A la tercera campanada salió como un rayo por la puerta del exprés hacia las Cuatro Calles donde estuvo alrededor de 10 minutos, pasando después a la plaza de la Catedral donde no hubo manera de que el animal saliera de allí, a pesar de los muchos intentos de los corredores. Sobre las 10 de la noche, Chechu Barrios acabó con él.

Podemos decir que la lidia de Pardillo tuvo dos partes diametralmente opuestas, una buena lidia en la plaza con un toro con cuajo y buena brega y una segunda que se puede catalogar como decepcionante en el recorrido por las calles del recinto amurallado.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios